Nochevieja: supersticiones y costumbres

Nochevieja: supersticiones y costumbres

29 diciembre, 2011

En plena contrarreloj hacia la ultima noche del año, inmersos en la vorágine de las citas, los brindis y los preparativos de una noche que promete ser mágica, quería despertaros la curiosidad y aportar un pequeño granito de «culturilla general», por eso de poder decir «nunca te acostarás sin saber una cosa más».

Hoy disponía de un ratito tranquilo, en silencio y con música, y me ha asaltado un pregunta…¿cómo celebrarán la nochevieja en otros países? ..seguro que hay curiosidades diversas, porque, sin ir más lejos…¿por qué comemos 12 uvas al son de las campanadas? Habrá quien considere también  tradición la presencia de Ane Igartiburu en la 1, o los espectáculos musicales tan propios de las fechas…

Pensaréis que debía estar muy aburrida para hacer una pequeña investigación sobre el asunto…y la verdad es que nada más lejos de la realidad…, me resulta irrefrenable ese impulso por saber, llamémosle «curiosear» sobre este tipo de celebraciones…

Os comentaré, por entrar en materia, que las primeras festividades se celebraron hace ya unos 4.000 años, de la mano de los babilonios, quienes organizaban festejos durante un periodo de 11 días y tenía lugar con el comienzo de la primavera.

Los egipcios, por su parte, hacían coincidir sus celebraciones con la crecida del Rio Nilo, lo que daba lugar a la preparación de sus tierras para la siembra.

Los romanos, al igual que los babilonios, celebraban la llegada de la primavera, el 25 de Marzo; hasta que el emperador Julio César cambio la fecha al día 1 de Enero, el primer día del mes dedicado al Dios Jano.

Existe un gran número de cábalas, tradiciones o usos que se ponen en practica para despedir el año y dar la bienvenida al ciclo entrante. El objetivo, es siempre coincidente: despedirse de los malos momentos, y procurarse salud, prosperidad o felicidad en general.

En España la tradición más extendida es la de comer una uva al son de cada una de las doce campanadas. Se dice que la costumbre nació en 1909, en la región de Elche, exactamente en el Baix Vilopó, cuando los agricultores de la zona promovieron esta acción con el fin de dar salida a un excedente de su cosecha; si bien, existen documentaciones que datan ya de 1897 y que revelan la existencia de este tipo de tradiciones en familias y regiones de España, ya en siglo XIX.

Una curiosidad es que la verdadera tradición manda que las uvas sean: 6 verdes y 6 moradas, prometiendo que los anhelos y aspiraciones lleguen a  hacerse realidad.

Yo personalmente soy un poco torpe, y/o demasiado golosa, así que prefiero despedir el año de una manera más dulce: con lacasitos. Rojos, marrones, amarillos o azules…quizás este año sea más selectiva con los tonos, por eso de comprobar si esto del color tiene o no algún tipo de influencia…en el futuro cercano.

Otra de las costumbres es depositar un anillo de oro en la copa de champagne con la que se brindará tras la uvas con el fin de asegurar prosperidad económica en el nuevo año. La lencería de color rojo  pretender dar un buen augurio en el amor…

En algunas familias es costumbre repetir en voz alta la frase «voy a ser Feliz este año» al sonar cada campanada…mi pregunta…¿antes o después de la uva? asumo que esto solo se puede dar en aquellas casas donde alguno de sus miembros sea médico o curandero eficaz..porque entre los nervios, la campanada, la uva, el hueso y la frasecita..¡menudo sarao!

Para las que son un poco fashion adictas, o compris-devotas, he averiguado un truco que sin duda pondré en practica: en nochevieja, ponte la ropa interior del revés, con ello, nos prometen…¡mucha ropa nueva! Vale la pena intentarlo…

La decoración de la mesa parece tener también su importancia, para lo que deben disponerse velas de colores: las azules procuran la paz, las amarillas, abundancia, las rojas, por supuesto, pasión; las verdes si necesitamos salud, las blancas, claridad y las naranjas, inteligencia.

Una tradición de origen latinoamericano, pero que parece empieza  contagiarse en España es tratar que la primera persona a la que abracemos al cumplir las doce campanadas sea más joven: cuanto menor sea, mayor será la felicidad. En otras versiones, la persona debe ser del sexo opuesto, para promover la buena suerte en el amor.

En algunos pueblos se reparten y esparcen espigas de trigo tanto en la mesa como en la casa, como símbolo de abundancia. Los comensales o los invitados a la celebración deben pasar la medianoche con un puñado de espigas en su mano y esparcirlas después por el suelo. Creo que mi madre pasaría palabra….y yo desde luego, no correría el riesgo…estoy segura de que no comenzaría el año con buen pie..en todo caso, con un buen zapatillazo, que parece lo mismo, pero no lo es…

En Argentina, la celebración de la Nochevieja se realiza también alrededor de una buena mesa, regada de sidra o champagne y aligerada con carne de vacuno, lechón y pollo. Una costumbre muy extendida en este país y en general en América Latina es la «quema de los muñecos», cuyo objetivo es desprenderse de todas aquellas cosas malas del año que termina. El muñeco se rellena de papeles y anotaciones de todos aquellos malos momentos, problemas o situaciones difíciles y se viste con ropa vieja. A medianoche se le prende fuego y a compás de la música y pirotecnia festiva, se crea una ambiente distendido con familiares y vecinos.

En Chile, por ejemplo, es una costumbre comer lentejas en el momento que cumplen las doce de la noche con el fin de conseguir prosperidad.

Otras costumbre es que la lencería debe ser amarilla con el fin de asegurar felicidad o conseguir pareja aquellos que no la tengan; en el caso de los varones, lo ideal es que «los chelos» sean regalados.

Curiosamente, al igual que en muchos de sus países vecinos, es también una tradición dar la vuelta  la manzana con una maleta, con el fin de disfrutar de grandes y emocionantes viajes el año entrante.

En Colombia, la tradición de las doce uvas es compartida, si bien cada uva debe contar con un proyecto o una meta a cumplir.

Una anécdota añadida en ecuador es que la noche del 31 de Diciembre cada uno debe un billete (mejor cuanto más valor) en su zapato derecho y cruzar la barrera de la medianoche con el dinero en su zapato. A las 12 se brinda con champagne y se rompe la copa en el suelo, tras lo cual se procede a la lectura del testamento del «monigote o el muñeco» al que se quema tras rodear o saltar sobre él 12 veces.

Algunos hombres se disfrazan de «viudas del año que termina» y piden dinero en la calle a los coches que circulan.

En Honduras, el muñeco es rellenado de cohetes, petardos y artículos de pirotecnia.

En Italia, lo más tradicional es el plato de lentejas y en Roma y Nápoles, al llegar las 12 de la noche se tiran por la ventana los trastos viejos e incluso muebles enteros para comenzar el nuevo año con buen pie. Por cuestiones de seguridad pública esa tradición ha sido prohibida, si bien, en algunas zonas o barrios residenciales la costumbre sigue arraigada.

En Bolonia tiene lugar la celebración de la Fiera del Bue Grasso (feria del buey gordo), en la que un buey es adornado con flores y lazos desde los cuernos hasta la cola y la fiesta termina a la medianoche, en un sorteo, en la que el ganador se queda con el animal. -Un bonito detalle para mi apartamento….-

En Venezuela, la mesa se completa con una sopa de lentejas, ensalada de pollo y hallacas. En Caracas, a las 12 de la noche se le denomina «el cañonazo», dado que antiguamente, la llegada del nuevo año se anunciaba con el sonido de los cañones del cuartel San Carlos.

Es tradición regalar un tarta típica entre amigos, puesto que la superstición asegura que fortalece la amistad.

En Sudáfrica no celebran  la entrada de un año nuevo, sino de dos, al son de las campanas de todas las iglesias. La costumbre invita  disfrazarse y salir a la calle a bailar a  ritmo de tambores  e instrumentos de percusión.

Los daneses, quizás uno de los mas curiosos, dedican la noche a lanzar sus vajillas contra las casas de sus amigos. Aquellos que más platos rotos encuentren a la mañana siguiente son los que pueden presumir de mayor números de amistades, una forma de medir la popularidad de cada familia. -Creo que esta costumbre la patrocinó Ikea…-

Otra de sus tradiciones consiste en incendiar un barril y hacerlo rodar por la calles para saludar al año que entra.

Los japoneses no se conforman con las 12 campanadas, sino que hacen sonar nada mas y nada menos que 108. Cada una de ellas invoca un deseo terrenal que debe mantenerse alejado.

En cuanto a  decoración, la casa debe estar vestida con bambú, muestra de honestidad y deben despedir el año riendo, puesto que es un símbolo de buena suerte.

Los australianos celebran la Nochevieja con un picnic en playa, entre concursos de surf.

En Brasil, lo curioso es que la indumentaria debe ser blanca, y se celebra la nochevieja también en la playa. Tradicionalmente es necesario introducirse en la orilla del mar y saltar siete olas, símbolo de buena suerte.

Los brasileños lanzan, además, flores frescas al mar mientras piden sus deseos al nuevo año.

Los holandeses y los belgas desafían las bajas temperaturas de diciembre bañándose en sus aguas heladas. En el caso de los primeros el menú tradicional incluye albóndigas y rodajas de manzana frita. Tras el chapuzón, para entrar en calor,  toman chocolate caliente acompañado de ron y snert, una sopa de guisantes. – ¿Yummy?

Los segundos cuentan con un tradición entrañable: los niños escriben cartas rimadas a sus padrinos para desearles lo mejor en el nuevo año.

Los alemanes destacan por un tradición que consiste en predecir la fortuna para el nuevo año observando las formas que toma el acero derretido al echarlo en agua fría.

París acoge uno de los desfiles de víspera de año más famoso de Francia, un festival de dos días que recorre las calles de la ciudad con cantantes, bailarines y artistas. Londres cuenta con un magnifico castillo de fuegos artificiales lanzados desde el London Eye.

Para mí, una de las costumbres más emotivas es sin duda la de los escoceses, denominada, first-footing.  Consiste en que amigos y familiares visitan la casa de los demás llevando un detalle, con el fin de contagiar la suerte en la casa del anfitrión. Este detalle es simbólico, desde un terrón de carbón, a un bizcocho o una botella whisky.-Me quedo con el bizcocho, a  ser posible..de chocolate- A medianoche los cañones del castillo de Edimburgo son disparados y son seguidos por la expolsion de los fuegos artificiales. Del 28 de Dicimebre al 2 de Enero se celebra un colorido festival en sus calles.

Los austriacos riegan sus festejos con un ponche elaborado a base de canela, azúcar y vino. Las calles cuentan con actuaciones de bandas y orquestas y se baila en ellas hasta avanzada la noche.

Los polacos hacen limpieza y se desprenden de todo lo viejo y la costumbre manda, pagar todas las deudas antes de finalizar el año.

¿Y vosotros tenéis algún tipo de tradición o costumbre curiosa?

He descubierto algunas otras creencias…divertidas..por si os animáis a ponerlas en practica…

Sentarse en cada campanada y volverse a levantar, si tu objetivo..es contraer matrimonio…. una opción perfecta su ti chico/chica no se decide a tirarse a la piscina…

Cocinar el pescado de la cena sin quitarle las escamas…conseguirás tanta prosperidad economica como escamas hayas comido… Un poco arriesgado…sin duda, pero, si vale la pena…

Lavarse las manos con champagne y azúcar, para atraer el dinero. a las 12 en punto inserta tus manos en un cuenco lleno de azúcar y al pasar un minuto, aclárate las palmas con el espumoso.

 

Fuente: Park Avenue

http://blog.park-avenue.es/sin-categoria/nochevieja-supersticiones-y-costumbres

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