Con estos sencillos trucos diarios, evitaremos el uso de productos tóxicos y tener que pasar una mañana de sábado o de domingo limpiando el baño. ¡Verás qué alivio
- Usa siempre una escobilla para limpiar el inodoro tras usarlo, así será más fácil limpiarlo.
- Echa vinagre a los sanitarios una vez a la semana, quedarán perfectos casi sin esfuerzo.
- Tras salir de la ducha, si se ha creado mucho vapor, aprovecha para secar los azulejos con un paño. Quedarán relucientes.
- Después de cada ducha, seca la mampara con un paño de algodón que no deje pelusa; así evitarás que la cal se incruste y ahorrarás tiempo de limpieza más adelante.
- Si tienes cortina en la ducha, enjuágala siempre después de la ducha para que no le queden restos de jabón ni espuma. Así se mantendrá limpia más tiempo.
- Ten siempre a mano una bayeta de microfibra para repasar el grifo del lavabo por las noches y evitar que se acumulen manchas de agua o cal.