No se conoce ninguna otra comida que haya tenido tan enorme propagación por el mundo en tan poco tiempo como la pizza.
A finales del siglo XIX salen de Italia alrededor de 4 millones de italianos con destino a América. Siendo los inmigrantes italianos muy amantes de su cocina se llevaron con ellos su gastronomía, cruzando así la pizza a través del Atlántico.