¿A cuántos os ha pasado que os compráis una sartén y a las primeras de cambio se le empiezan a pegar los alimentos? Según los expertos en el 90% de los casos se debe a un mal uso. Por eso, estad atentos a nuestro artículo y no cometáis los errores de siempre.
A la hora de cocinar
Aceite: Se trata de un gran aliado a la hora de preservar tus sartenes. De primeras porque cocinar los alimentos sin él resulta perjudicial para el antiadherente y, segundo, porque mientras estemos cocinando nos puede ayudar a desenganchar la comida que se vaya pegando. No obstante, no hay que cometer el error de cocinar con el aceite demasiado humeante, ya que merma las propiedades de las sartenes.
Fuego: Es importante que el diámetro del fuego de la vitrocerámica sea igual al diámetro del fondo de la sartén. Igualmente, en el caso de cocinar con gas, las llamas no deben sobrepasar el fondo. Si has terminado de cocinar, nunca dejes la sartén en el fuego sin comida, ya que se sobrecalentará.
Utensilios: Mientras estés cocinando no utilices cuchillos, tenedores u otros utensilios metálicos para remover la comida, ya que rayarán la sartén. La opción más adecuada son los utensilios de silicona o madera.
A la hora de limpiar
¿Lavavajillas?: Aunque la mayoría de los fabricantes ponen que sus sartenes son aptas para lavavajillas, no se trata de una buena idea si queremos que duren más tiempo. La temperatura del lavavajillas es agresiva para las sartenes y deteriora su antiadherencia.
Grifo: Lavar a mano es la mejor opción. Sin embargo, es un error pasar la sartén bajo el agua nada más terminar de cocinar. Los contrastes de temperatura reducen las capacidades antiadherentes. Lo primero que hay que hacer con la sartén caliente es pasar un papel de cocina para retirar los restos de comida y de grasa fácilmente y después esperar a que se enfrié durante aproximadamente diez minutos.
Estropajo: Es el gran enemigo de las sartenes sobre todo si se utiliza por el lado equivocado. Siempre hay que frotar por la parte blanda del estropajo con una pizca de jabón. Para aclarar, con una pizca de agua es suficiente.
A la hora guardar
Lo ideal es colgar las sartenes, no apilarlas una sobre otra directamente. Pero, si no hay más remedio, recomendamos colocar un protector entre sartén y sartén.
¿Cuándo debemos cambiar la sartén?
No hay un tiempo exacto para determinar la duración de una sartén, todo depende de cuánto la usemos y del trato que le demos. Debemos cambiarlas cuando el recubrimiento esté desgastado. Lo notaremos visualmente y cuando la comida se pegue al cocinar.