Los más “viajeros” aprovechan la magia de la Navidad para irse a alguna ciudad emblemática a disfrutar de los últimos días del año. Teniendo en cuenta lo especial de estas fechas, la mayoría de las ciudades se visten con sus mejores galas para recibir a la gran cantidad de turistas que las invaden en busca de nuevas experiencias.
Si pensamos en ciudades mágicas para pasar la Navidad a todos se nos vienen a la cabeza capitales europeas como París, Roma o Londres. Pero hay otras ciudades con encanto que nos pueden ofrecer una gran variedad de actividades, espectáculos y vivencias jamás disfrutadas. En todas ellas, podremos sentir el espíritu navideño junto a la tradición de sus celebraciones y el romanticismo de sus iluminadas calles.
Son muchas las opciones y ocho nuestras recomendaciones para recibir al año 2012:
París: Es la considerada ciudad más romántica del mundo y en Navidad se vuelve aún más especial. La ciudad de la luz se enciende con todo su esplendor.
Los Campos Elíseos repletos de luces, la Torre Eiffel y la noria iluminadas, la decoración navideña de las Galerías Lafayette, el gran árbol frente a Notre Dame o las tiendas vestidas de gala son algunas razones por las que visitar la capital francesa en estos días.
Foto: Andrea Guerra París en Navidad
Frankfurt: Una de las ciudades más desconocidas de Alemania, pero con una gran tradición navideña. Tiene uno de los mercadillos de Navidad más bonitos y antiguos de Europa que se instala cada año en la plaza central de Römerberg, el centro histórico de Frankfurt. También se monta un árbol de Navidad gigante, hay música y delicias típicas para degustar como los bizcochos rellenos de naranja.
Roma: La capital italiana es uno de los destinos más elegidos por la magia de las piazzas o las iglesias milenarias. En las tardes navideñas es aconsejable pasarse por los mercados de la Piazza Navona donde con motivo de las fiestas ponen puestos donde podemos encontrar multitud de adornos navideños. No hay que olvidar comer algún día lentejas ya que son consideradas por los romanos símbolo de prosperidad para el Año Nuevo.
Viena: En la ciudad del vals, el Adviento se vive muy intensamente. Las calles se llenan de mercadillos por doquier. El más importante, Christkindlmarkt, se instala en la plaza del ayuntamiento. El agua de los estanques se congela, se oye música gospel, se compran adornos navideños artesanales y se toma ponche, vino, galletas y castañas. En fin de año hay celebraciones de gala en toda la ciudad y por supuesto, el famoso Concierto de Año Nuevo de la Orquesta Filarmónica.
Venecia: La ciudad de los canales se ilumina con más intensidad en Navidad. Un paseo en góndola al anochecer precederá a un fin de año mágico. No hay que olvidar el concierto de Fin de Año de Venecia en la Scuola Grande di San Teodoro.
Londres: Pasar la Noche de Fin de Año en una ciudad como Londres se puede convertir en un momento irrepetible y mágico. Para recibir la entrada al nuevo año todo el mundo se reúne junto al Big Ben. Los fuegos artificiales iluminan el cielo más urbanita junto al río Támesis.
Moscú: En la capital rusa se puede vivir una Navidad con tradiciones muy diferentes al resto de Europa. De acuerdo al calendario ortodoxo, la Navidad la celebran el 7 de enero cuando ayunan durante todo el día para darse un gran banquete de 12 platos (uno por cada uno de los apóstoles). El Año Nuevo es una fecha muy esperada en la que el “Abuelo de hielo” junto con “la Niña de Nieve” reparte regalos, pasteles de jengibre y Matriuskas (muñecas rusas que contienen dentro de sí muñecas más pequeñas) a los niños.
Berna: Cientos de lucecitas adornan las calles de esta emblemática ciudad, donde se puede sentir el olor a vino caliente y pan de especias. No falta el mercadillo navideño frente a la catedral.
Y hasta aquí nuestras sugerencias para pasar una noche de Fin de Año inolvidable, eso sí, estéis donde estéis desde Palacios os queremos desear a todos un año 2012 lleno de éxitos personales y profesionales.